El pan de espelta es un pan de textura suave, de miga liviana y sabor dulzón, que ha
reaparecido en las mesas desde mediados del siglo pasado, después de permanecer en el olvido por
más de 8000 años.
El pan espelta, está hecho con una especie de trigo llamado espelta, que es el
predecesor de los trigos modernos, aparecido hacia el año 7000 a.C., y conocido por los egipcios.
La espelta es la madre de todas las especies de trigo, este cereal contiene más cantidad de
nutrientes que los actuales trigos, siendo mucho más saludable su consumo, tiene un bajo contenido
de gluten lo que lo hace más fácil de digerir, y además contiene el doble de fibra, lo que aporta
innumerables beneficios al organismo.
En la Edad Media se usaba la espelta para elaborar el pan de los más adinerados,
y se dejaba el centeno para los más pobres, sin embargo las dificultades de molienda que este daba,
motivado a lo duro de su cascara, fue dejándolo detrás de otros trigos más blandos, ya que esta
dureza encarecía el proceso de producción, así que al pasar de los años fue perdiendo terreno
frente a los trigos de nuevas generaciones.
Este espécimen de trigo es inclusive mucho más resistente al frio y a la sequia
que los trigos modernos.
En la década de los 60 el
pan de espelta
renace cuando la Nasa en su búsqueda de obtener alimentos más nutritivos para los astronautas,
explora distintas opciones de cereales, topándose con este bondadoso espécimen, aunque su uso nunca
fue destinado al programa espacial, sus investigaciones dieron pie a que los grupos de ecologistas
vieran a la espelta como una salida al déficit nutricional donde hemos llegado, desde entonces
diversas instituciones han destinado recursos a la siembra y procesamiento de este cereal, haciendo
posible hoy en día conseguir
harina de espelta
integral en supermercados y tiendas especializadas en buena nutrición, o tiendas naturistas.
Indudablemente el pan de espelta es la panacea nutritiva para este nuevo milenio
y junto a otros cereales como el amaranto y la quínoa, parecen ofrecernos una opción de alto
contenido de nutrientes que según los expertos nos hará sobrevivir en los próximos siglos
Receta de pan de espelta
¿Te apetece probar el pan de espelta? Pues lo tienes fácil, solo has de seguir
lo pasos de esta receta y tendrás listo en muy poco tiempo este pan cuya receta original tiene ya
más de 8000 años de antigüedad.
Ingredientes del pan de espelta
- 600 gramos de harina de espelta integral.
- 25 gramos de levadura seca.
- 350 mililitros de agua tibia.
- 2 cucharadas de aceite de oliva virgen extra.
- 1 cucharadita de azúcar.
- 1 cucharadita de sal.
Elaboración de pan de espelta casero
- En un bol mezcla todos los ingredientes secos.
- Sobre una encimera, forma un volcán con la harina y vierte el agua y el aceite,
amasa enérgicamente hasta conseguir una masa suave y compacta que no se pegue en los dedos.
- Coloca la masa en un bol grande y tápala con un paño húmedo por espacio de 3
horas, recuerde que la espelta tiene bajo contenido de gluten por lo que el proceso de leudado es
más largo.
- Una vez leudada la masa, formar el bollo o la barra de pan, hacer unos cortes
en la superficie y llevar a horno precalentado a 200 ºC por espacio de 30 minutos, en el horno
introduzca un cuenco con agua, para mantener la humedad en el mismo.
Este pan de espelta se puede usar en cualquier preparación en sustitución de los
panes tradicionales, aumentando el nivel nutritivo de las comidas y aportando vitaminas
adicionales.