Las harinas sin gluten son las más idóneas para las personas celíacas, alérgicas o con
problemas digestivos. Disminuye considerablemente la inflamación del tracto intestinal, los
espasmos y las flatulencias. Cada vez hay más alimentos sin gluten en el mercado, debido a la gran
demanda que tienen.
El gluten es la proteína que se encuentra en el trigo, la cebada y el centeno.
Cuando se extrae del cereal se pierde gran cantidad de proteínas. Es aconsejable combinar los
alimentos a los que se les ha extraído el gluten junto a otros para incrementar su aporte
nutricional. Se cree que los alimentos que no contienen gluten, pueden provocar un aumento de peso,
al contener altos niveles de azúcar y grasa. La
harina sin gluten
es una excelente opción pues permite elaborar distintas recetas ligeras.
Hay distintas variedades de harinas que no contienen gluten, entre ellas, cabe
destacar:
- La harina de almendras: aporta humedad, textura y sabor. Contiene una gran
variedad de minerales, fibra, grasas, vitaminas y proteínas.
- La harina de soja: contiene un alto porcentaje de calcio, proteínas, minerales
y fibras saludables para mejorar la digestión. Aumenta el valor proteico de cualquier
receta.
- La harina de avena: aporta vitaminas, minerales, fibras y proteínas. Aporta una
textura más suave y un sabor delicioso.
- La harina de arroz: contiene hidratos de carbono. Se recomienda utilizarla con
otras harinas para elevar su aporte nutricional.
- La harina de maíz: contiene aminoácidos, hidratos de carbono. Tiene un sabor
suave.
- La harina de quínoa: contiene mucha proteína biológica. Ayuda en el correcto
funcionamiento del metabolismo y en la sana actividad hormonal.
Las harinas que no contienen gluten pueden mezclarse cuando se utilizan para
preparar pan con semillas como el sésamo, amapola, la linaza, y las pipas de girasol, para aportar
riqueza nutricional y un sabor más agradable. Se pueden mezclar las
harinas sin gluten
con frutas, verduras, huevos, miel y hortalizas, todos ellos alimentos sin gluten, con los que
combinan perfectamente.
Receta de pan sin gluten
- 500 gramos de harina panificable sin gluten.
- 10 gramos de levadura en polvo.
- 300 mililitros de agua templada.
- 2 cucharaditas de sal.
Elaboración del pan sin gluten
Mezclar la harina panificable sin gluten, la levadura en polvo y la sal. Cuando
esté bien mezclado, hacer un hueco en el centro y echar el agua templada poco a poco, mezclando con
el resto de ingredientes.
Hacer una bola con la masa, introducirla en un bol, taparla con un trapo húmedo
y dejar fermentar durante 1 hora a temperatura ambiente (25-27 ºC). Cuando la masa ha doblado su
volumen, amasar de nuevo de forma suave y darle la forma deseada.
Se coloca la masa en un molde para pan, o bien, hacer varios panecillos.
Colocar la masa con la forma deseada en una bandeja para horno cubierta con
papel de horno, cubrirla con un trapo húmedo y dejar fermentar durante 1 hora.
Una vez que se ha levado por segunda vez, hacer unos cortes en la parte superior
y rociar la superficie con un poco de agua con un vaporizador.
Precalentar el horno durante 20 minutos a 220 ºC. Colocar un recipiente de agua
dentro del horno y hornear el pan durante 45 minutos a 200 ºC.
Sacar el pan sin gluten del horno y dejarlo enfriar antes de servir.