La harina de fuerza es un tipo de harina que contiene una elevada cantidad de gluten. Se
utiliza para mezclar con otras harinas distintas, en especial aquellas que son bajas en gluten o
que carecen de él, para «apoyarlas» y permitir que puedan levar (aumentar de tamaño) de la forma
adecuada. Al no necesitar soltar el gas que otras harinas sí necesitan, la
harina de fuerza
se hace necesaria para complementarlas.
La harina de fuerza suele ser difícil de manejar, se necesita mucha fuerza para
hacerlo, no se estira fácilmente, sobre todo si queremos hacerlo a mano, es más adecuado hacerlo
con un robot especial para amasar.
La harina de fuerza es ideal para preparar panes, brioches, empanadas,
panettones y bizcochos. Es muy útil cuando se quiere añadir a una masa azúcar, huevos, aceite,
mantequilla u otros enriquecedores, pues no suelen subir correctamente. Gracias al gran contenido
de gluten que contiene la harina de fuerza se le puede añadir una gran variedad de alimentos.
Existe la harina de trigo de fuerza ecológica. No contiene aditivos, por
lo que le resta algo de la fuerza en comparación con la harina de fuerza convencional. Es idónea
para mezclarla con otros
tipos de harina
de cultivo ecológico, como la de centeno, espelta, arroz y maíz, las cuales tienen menos
fuerza.
También existe la variedad de la harina integral de fuerza molida a la
piedra. Esta
harina integral
mantiene su germen y su salvado y proviene del trigo de fuerza. Se elabora de forma artesanal. Es
bastante más baja su fuerza que la de la harina de fuerza convencional, pero a cambio, se obtiene
un sabor más agradable en su elaboración.
Es más aconsejable utilizar la harina integral de fuerza, o bien, la harina
fuerza de trigo ecológico, si queremos aumentar el valor nutricional y mejorar el sabor de la masa
que realizamos.
Receta de pan con harina de fuerza
- 250 gramos de harina de fuerza.
- 110 gramos de harina integral.
- 175 centilitros de agua.
- 20 centilitros de aceite de oliva.
- 25 gramos de levadura fresca.
- Una cucharadita pequeña de sal.
Pan con harina de fuerza paso a paso
Mezclar en una taza el aceite, la levadura fresca y el agua templada hasta
obtener una conseguir que se disuelva completamente.
En un bol mezclar la harina de fuerza y la harina integral, la cucharadita de
sal, hasta que todo esté bien mezclado. Incorporar el agua y el aceite de oliva y volver a mezclar
unos minutos, hasta conseguir una masa homogénea.
Nos debe quedar una masa flexible pero no demasiado pegajosa. Si es así, añadir
un poco más de harina para que absorba un poco más de líquido. También podríamos añadirle un
poquito de leche.
Enharinar una superficie y amasar de nuevo, moldeando la masa hasta darle una
forma alargada. Añadirle harina por encima a la masa y practicar unos cortes en su
superficie.
Precalentar el horno durante unos 20 minutos a 250 ºC. Introducir un bol de agua
para que la corteza del pan quede más crujiente. Hornear durante 40 minutos a 220 ºComo
máximo.
Retirar el pan del horno y dejar enfriar sobre una rejilla.